La Universidad San Ignacio de Loyola (USIL) ha levantado por todo lo alto el "Concurso Nacional de Ensayos Literarios sobre Fernando Belaunde Terry". El premio: jugosos S/.15 000 para el ganador. ¿Alguien había visto en su vida un premio tan alto para un concurso de ensayos?

A eso sumémosle la alucinante publicidad: diarios, una página web ad hoc, Facebook, conferencia de prensa, ¡anuncios en televisión a horario estelar!

Los dos primeros párrafos de las Bases son delirantes, premio al que le encuentre conexión causal entre el primer y segundo párrafo.

Bueno, ya sabemos que el dueño de la USIL, Raúl Diez Canseco, no sólo es sobrino del fallecido ex presidente Fernando Belaunde, sino que también ambos militaron en Acción Popular.

Si yo fuera alumno de la USIL protestaría mal: OE Diez Canseco, deja de tirarte nuestra plata en tus inútiles caprichos  y baja un poco las pensiones, no uses la USIL como tu chacra.  O sino, homenajea a algún peruano que merezca más reconocimiento. Ok, Belaunde no fue un dictador, respetó la libertad de prensa y todo, pero según demuestra la Comisión de la Verdad (CVR):

En errada estrategia primero minimizó a las fuerzas terroristas, luego militarizó el conflicto.

Su gobierno toleró las violaciones a los DDHH de parte de las fuerzas estatales.

Durante su quinquenio se produjo la mayor cantidad de muertes por el conflicto.

¿Estadista? ¿Demócrata? Ahora viene lo que también me encanta: ¡el jurado!

Augusto Ferrero Costa,  ¡¡Juan Luis Cipriani!!, Miguel Cruchaga Belaunde, Lourdes Flores Nano, José Agustín de la Puente Candamo (¿no es también del Opus Dei?) y Francisco Miró Quesada Rada.

A que ya se imaginan cómo tienen que abordar (mejor si no lo hacen) el tema de la CVR. Claro, si quieren ganarse el bille, ser publicados, etc, etc.